Esa noche amaneció muy oscura,
y las apuestas me daban perdedor,
me eche colonia y me limpié la dentadura,
salí a la calle en busca del amor.
¡Y vaya si tuve suerte!
¡Esta es mi noche carajo!
la rubia estaba de muerte,
la fallaba lo de abajo.
Y entonces de repente,
ella me dio la sorpresa,
soy Manolo y no Cristina.
Y yo que estaba muy caliente,
al notársela tan tiesa,
pues me unté con vaselina.
Compartir la entrada "¡Esta es mi noche!"