No puedo vivir ajeno a la maldad,

que lamentablemente corrompe nuestras mentes,

ni es compatible muerte y libertad,

ni tampoco asesino e inocente.

 

No soporto a gobernentes genocidas,

que arrasan mil ciudades sin reparo,

ni aquel que apoyo a Bush a quitar vidas,

las mismas que un día 11 nos quitaron.

 

Mientras unos lucen sus relojes de oro y cuarzo,

algunos aun no pueden dormir,

por culpa de algún hijo de perra.

 

Que pena que aquel 11 de Marzo,

por desgracia fueran a morir,

aquellos que dijeron no a la guerra.