«El patio de mi casa es particular,

la marihuana crece en cualquier lugar».

 

La planto to los años,

en todas mis macetas,

mis colegas tacaños,

la fuman por la jeta.

 

Cuando yo la recojo,

vienen todos a verme,

me ponen como excusa,

no tengo pa ponerme.

 

Antes yo los veía,

solo una vez por semana,

ahora todos los días,

porque les doy marihuana.

 

Yo les pongo en fila,

igual que estando en el paro,

alguno me pide tila,

y otros me piden jamaro.

 

La cola va en aumento,

va a empezar el reparto,

si yo no estoy atento,

la cola llega hasta el cuarto.

 

Y mis vecinos furiosos,

no me miran al pasar,

ya que están envidiosos,

pues no les doy pa fumar.

 

Tan solo con el humillo,

se tienen que colocar,

sentaos en el descansillo,

aspirando sin parar.

 

Los miro por la mirilla,

y los veo con el mono,

les tiro una chinilla,

y ya se ponen a tono.

 

Y cantan las mañanitas,

que cantaba el rey David,

¡la confianza da asco,

ahora me piden speed!