No amenaces con cortarte las venas,

ni me vengas con patrañas y movidas,

que las penas con pan, son menos penas,

y el vinagre cura las heridas.

 

Volveremos como gatos escaldados,

a empezar desde el punto de partida,

solo somos corazones oxidados,

compitiendo en el juego de la vida.

 

Que en el amor no existe la fortuna,

ni hay sirvientas ni doncellas,

ni príncipes encantados.

 

Solo hay risas, sol y luna.

y en tus ojos las estrellas.

y sentirse enamorado.